Nuestros compañeros de viaje son muy especiales desde un marinero que ha navegado por los siete mares a una cometa que nos lleva dónde más nos apetezca, pasando por unos ratoncitos que dan la vuelta al mundo en 80 minutos y un superhéroe que todo lo vigila.
En este puzle la bola del mundo se puede separar del resto y es reversible, si estamos en Rio de Janeiro podemos montarla de un lado, si estamos en Barcelona del otro.